Y por fin, en nuestra ruta por la Selva Negra, llegó Baden Baden. Las expectativas generadas por la ciudad más elegante y glamurosa de Alemania se superan con nota.
La capital europea del veraneo durante la Belle Époque, no ha perdido nada de aquel peculiar encanto, y se presenta como una ciudad de adorable toque «vintage».
Pero, no te confundas, Baden Baden es ahora una ciudad moderna, adaptada a los tiempos actuales. Una ciudad que atrapa por su belleza arquitectónica, su buen rollo y glamour.

Ropa de alta costura, pamelas, trajes, mucha joya, olorosos perfumes, coches deportivos y de alta gama. El glamour se pasea con naturalidad por la ciudad.
La mezcla de estilos y de personajes resulta curiosa y divertida. A veces crees que la mismísima Marlene Dietrich camina a tu lado. ¡Baden Baden es un espectáculo en sí misma!
Una tarde estival en Baden Baden
Tras aparcar el coche en una calle sin zona azul, (costó encontrarla, pero existe), comenzamos nuestra ruta a traveés de las calles del centro.
Enseguida nos topamos con el monumental edificio de las Termas de Caracalla.
Una pena ir con el tiempo justo, el acceso es abierto y puedes acceder a los diferentes servicios que ofrecen: masajes, sauna, tratamientos para la piel.

– La vieja ciudad balneario
Baden Baden ya era conocida en época del Imperio Romano por la calidad de sus aguas.
Recomendamos una visita pausada al yacimiento arqutológico de esta época.
La ciudad está repleta de fantásticos balnearios, mientras caminas se aprecian fuentes de aguas calientes brotando al exterior.
Tras Caracalla, unas empinadas escaleras acceden a antiguas zonas de balnearios. Un mirador nos permite conocer parte de la ciudad desde las alturas, ¡las vistas son maravillosas!

Continuamos en la zona de los antiguos balnearios, el estilo florentino e italianizante otorga a la zona una equilibrada elegancia. A veces da la sensación de estar en la toscana.
Una serie de esculturas modernas contrastan con el clasicismo de las formas. El conjunto resultante es de gran belleza. Nos acercamos a la Markplatz de Baden Baden.
– El romanticismo del Monte Florentino
El Monte Florentino con su estilo de jardín Mediterráneo nos da la bienvenida y entramos en un estado de atontamiento, posiblemente tenemos «Sindrome de Stendhal».
La belleza se debe adiestrar en pequeñas dosis, poco a poco.
En Baden Baden todo es de golpe, sin anestesiar, aún así no resulta empachosa.

– La Markplatz
En plena Plaza del Mercado sobresale la Colegiata, decidimos visitarla.
El interior destaca por la colección de sepulturas de los catorce Magraves de la región de Baden, así como por el crucifijo en piedra tallada de unos cinco metros de altura.

La Marktplazt es grande, resulta extraña su ubicación casi en las afueras del centro urbano.
Una interesante hilera de casas nos devuelve al casco antiguo a través del ayuntamiento y de las «Escaleras de Bismarck».
-El centro de Baden Baden
El centro de la ciudad está muy ambientado, repleto de terrazas y tabernas típicas alemanas.
Durante un buen rato paseamos por la calle más larga de la ciudad que atraviesa su corazón, la Lange Str.
La calle está repleta de tiendas exclusivas y edificios clásicos, románticos y eclécticos de elegante tonos pastel.

El arte, la cultura y el ocio destacan en la vida de la ciudad.
Los museos, jardines, teatro, casino e interesante vida social hacen de Baden Baden un destino turístico destacable en la Selva Negra y en general en toda Alemania.
Kurhaus y Kurgarten, el glamour se escribe con «k»
Dejamos atrás el centro para adentrarnos en la glamurosa zona del Kurgarten, jardines donde se sitúa la Trinkhalle, sublime galería de columnas corintias y murales.
En uno de los laterales es muy recomendable sentarse a tomar un rico café y dejarse llevar por el lujo y el exceso del casino de Baden Baden.

– El casino más bello del mundo
Según nos cuentan, han sido muchas las notables fortunas perdidas en el considerado «Casino más bello del mundo».
Se respira un aire de decadencia y exceso de lujo de épocas pasadas.
El acceso es libre, pero los caballeros deben entrar con corbata y chaqueta. Si no llevas te prestan unas en la recepción. Para las mujeres no hay exigencia de etiqueta.
Cuando accedes al interior, de nuevo ese toque decadente de grandes fortunas y épocas mejores. Aquí huele a pasta, ¡pero no la italiana precisamente!
Hemos llegado en un día de fiesta, el exterior del casino está rodeado de productos de la zona, vinos, cervezas y música folclórica y nos dejamos llevar por el ambientazo.
En un momento dado ha sonado hasta el «Viva España» y nos moríamos de la risa.
Ver a señoras con pamela, trajes de Chanel, joyas, bailando pasodobles, mezclando sus carísimos perfumes con el olor de la comida, de las salchichas, del humo de las barbacoas, de la cerveza no tiene precio.

¡Vamos una verbenea de barrio pero con caché!. La increíble mezcla nos ha hecho sonreír.
Cae la tarde y aunque nos hubiéramos quedado para siempre aquí, debemos regresar a nuestro apartamento en Baiersbronn.
Decidimos continuar nuestro paseo y descubrir algunas zonas más de la ciudad. Baden Baden está repleto de interesante rincones que te enganchan.
A lo largo de los jardines existe una zona de elegantes boutiques de firmas internacionales que te deja sin respiración.
Soportales de toque clásico con farolas de gas que se encienden cada noche a la antigua usanza.

Con una sonrisa tonta en nuestra cara, abandonamos esta bella e interesante ciudad de la Selva Negra. Otro lugar al que queremos volver para terminar de disfrutarla.
Baden Baden es sublime, uno de esos lugares exclusivos que parece poco interesante. Nada más lejos de la realidad.
La ciudad es acogedora y merece la pena visitarla. ¡A nosotros, sencillamente, nos ha encantado!
Qué bonito! Parece de cuento 🙂
Hola Diana!, si, realmente toda la Selva Negra parece sacada de un cuento ;-). Está todo muy bien cuidado y repleto de lindos colores
Hola Eva: me ha encantado el recorrido por Baden-Baden. La verdad es que estos lugares que surgieron en el Romanticismo, llenos de encanto y en enclaves preciosos son dignos de ver. Si además cuentan con aguas termales, aún mejor.
Me han gustado también mucho las fotos, tomo nota para próximos viajes.
Gracias.
Hola Cristina, gracias por el comentario ;-).
La Selva Negra es un lugar que desborda los corazones románticos. Y en particular Baden Baden, con sus alamedas, jardines y baños termales sacados de otras épocas, rebosante de elegancia te deja atontada!.
Me alegro que el post te sirva para pensar en próximos viajes!
Saludos, Eva
Otra zona de Europa que me falta por descubrir de este maravilloso país que tiene no uno si no varios viajes posibles. Me recuerda otras poblaciones balnearias como Karlovy Vary en Chequia, pero me parece que esta era la más aristocrática.
Hola Jordi, gracias por tu comentario. Si, exencialmente Baden Baden recuerda a una ciudad muy aristocrática pero después descubres el buen ambiente que tiene y no te sientes para nada «fuera de lugar»
Saludos!
Buenas! Enhorabuena por el blog, estamos preparando un viaje a la Selva Negra para este verano y nos está siendo de mucha utilidad.
¿Podeis concrear por qué zona aparcastéis sin tener que pagar? pq por mucho que busco esta información por internet no encuentro nada, y si te pasas el día visitando al ciudad puede salir por un pico viendo los precios de los parkings.
Muchas gracias!
Hola Victor.
Pues recuerdo que aparcamos por unas calles empinadas no muy lejos del centro, te recomiendo callejear por sus alrededores hacia calles residenciales donde aparcar es gratuito. Baden Baden no es muy grande, así que como mucho, puedes tener un paseo de 10 o 15 minutos de donde dejes el coche al centro.
Disfrutad de la ciudad. Y si os podeis permitir una sesión de relax en los balnearios Caracala, es para luego recordar 😉