Cataluña es uno de nuestros destinos favoritos, ideal para hacer escapadas de fin de semana o road trips cercanos.
En parte, por ser la comunidad autónoma donde vivimos y, en parte, debido a la excepcional colección de pintorescos pueblos, históricas comarcas y bellas ciudades con los que cuenta, como por ejemplo su afamada capital, Barcelona, la majestuosa Girona, la histórica Tarragona o la encantadora Lleida.
Además, en otras zonas menos populares existen rincones que merece la pena conocer. Un ejemplo de ello es Tàrrega, capital de la comarca de Urgell, un destino perfecto para reservar una escapada de fin de semana a través de eBooking y descubrir una de las ciudades más interesantes y completas de la provincia de Lleida.
Tàrrega es famosa por acoger el principal certamen de artes escénicas del sur de Europa, conocido como Fira Tàrrega (Feria del teatro en la calle).

Creado en 1981, se ha convertido en todo un referente, especializándose en la creación de arte innovador al aire libre.
Nosotros hemos disfrutado de esta feria en varias ocasiones.
Siempre que podemos, dejamos un hueco pendiente en el mes de setiembre para viajar hasta la provincia natal de Carmelo y disfrutar de sus festivales, sus gentes y sus infinitas rutas culturales y de naturaleza.

Pinceladas de historia de Tàrrega
Los orígenes de la Tàrrega se remontan a la época de dominio musulmán, cuando se construyeron el castillo y parte de las murallas, en el siglo X.
A mediados del siglo XI el Conde de Barcelona Ramón Berenguer I conquistó el castillo targarí.
A partir de ese momento la villa inicia una época de esplendor. Su excepcional ubicación como cruce de caminos, la convirtió en una localidad de importante papel económico y territorial durante la Edad Media.
Una fructífera comunidad judía, la existencia de importantes gremios y artesanos, la vitalidad comercial, las abundantes concesiones conseguidas por sus condes y el privilegio de tener un mercado semanal, atrajeron la prosperidad a la villa.

La crisis del siglo XIV
Pero la crisis del siglo XIV acabó con esta etapa de prosperidad.
La peste, el despoblamiento, las continúas guerras y una sociedad cada vez más temerosa llevan al amurallamiento de la ciudad y a una profunda crisis que ni siquiera se ve aplacada por la concesión, del emperador Carlos I, para que el escudo de Tàrrega lleve el águila imperial.
La crisis y el pronunciado carácter rural son los factores con los que convive la ciudad hasta bien entrado el siglo XIX cuando Tàrrega inicia toda una serie de cambios y aperturas.
La inauguración de la línea del ferrocarril Manresa-Tàrrega-Lleida (1860), el Canal de Urgell (1862), las obras de la muralla tras la riada de Santa Tecla (1874) o la concesión del título de ciudad por Alfonso XII (1884) provocan una serie de cambios necesarios en la ciudad.
Tàrrega hoy
Actualmente Tàrrega, es una importante ciudad de la plana de Lleida (ronda los 18.000 habitantes) situada a unos 100 kilómetros de Barcelona.
Ubicada en las orillas del río Ondara, el municipio cuenta con una interesante oferta turística y de ocio.
El término municipal comprende también los pueblos de Altet, Claravalls, La Figuerosa, El Talladell (que también visitamos), Riudovelles, Santa María de Montmagastrell y el núcleo deshabitado de Conill por los que merece la pena caminar sin prisas.

Fuente: web del ayuntamiento
Tàrrega, destino para practicar senderismo sin masificaciones
Las rutas de senderismo son un plan perfecto para quienes buscamos el contacto directo con la naturaleza en sitios discretos, poco frecuentados y alejados de las aglomeraciones de las ciudades.
En Tàrrega existen dos rutas naturales que cumplen estos requisitos.
Una de ellas transcurre al lado del río Ondara. La otra, se adentra hacia la localidad de Verdú y la Vall del Corb.
En ambas, los paisajes y las zonas de vegetación son las grandes protagonistas.

Además, si eres un amante de las rutas culturales, Tarrega es un hito del Camino Ignaciano, la etapa 24 de esta ruta, antiguo Camí Reial, pasa por la ciudad en su tramo entre Verdú y Cervera.
Unos kilómetros al sur, puedes disfrutar de la Ruta del Císter, un itinerario cultural que sigue el trazado del GR175 y transcurre por las comarcas del Alt camp, la Conca del Barberà y el Urgell, atravesando el corazón de Cataluña.
El recorrido enlaza los tres monasterios cistercienses más importantes de la región: Santa Creus, Poblet y Vallobona de les Monges (situado a pocos kilómetros de Tàrrega).
Por todo esto nos encanta esta ciudad, un interesante cruce de caminos y senderos entre las ciudades de Barcelona y Zaragoza, ideal para los amantes de las buenas rutas y del patrimonio desconocido.
Si te apetece conocer más profundamente la capital de la comarca de Urgell, te compartimos sus secretos.
¿Qué ver y hacer en Tàrrega?
Desde la oficina de turismo nos proponen una serie de rutas temáticas a las que no podemos decir que no.
Mapa en mano, recorremos tranquilamente el casco antiguo repleto de notables edificios.
Además, entre sus calles, aún resuenan los ecos del notable esplendor del barrio judío, “El Call” y los restos de la impresionante adobería del Molí de Codina.
– Plaza Mayor
Iniciamos nuestra visita en la plaza mayor donde sobresale el estilo barroco de la Parroquia de Santa Maria de l’Alba.
Imprescindible visitar las pinturas y reliquias de su interior.

– Carrer del Carme
Seguimos nuestro paseo por esta encantadora calle donde se sitúa un interesante y fotogénico conjunto de porches medievales.
Destaca el Palacio de los Marqueses de la Floresta, un edificio del siglo XIII con fachada de estilo románico civil, declarado Bien Cultural de Interés.
Si eres amante de las curiosidades, te contamos un secreto, este palacio está reproducido en el Poble Espanyol de Barcelona.

– Plaza del Carmen
Al final de la calle se abre la plaza de mismo nombre, sobresale en un un lateral el renacentista Convent del Carme.
La plaza es uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Destacan varias esculturas y monumentos, como el dedicado al compositor Ramon Carnicer.
Desde la plaza, remontamos por la Avenida de Cataluña hasta la plaza del Pare Careles Perelló para acceder de nuevo al casco antiguo hasta la Torre del portal d’Urgellet.

– Pozo de hielo y castillo
Seguimos el trazado de la antigua muralla a través de la calle del Pou de Gel para llegar al depósito subterráneo donde se guardaba el hielo destinado a la conservación y refrigeración de los alimentos (pozo de hielo – pou de gel).
La estructura tiene forma cilíndrica en el cuerpo inferior y una cubierta con bóveda de media esfera, con un diámetro interno de unos ocho metros y una altura de casi diez metros.
Al lado se encuentran los restos del castillo, en la parte alta de la ciudad. A pesar de su estado, el castillo sigue siendo el centinela de Tàrrega.
Sus inicios datan del siglo XI cuando Ramon Berenguer I conquistó la plaza a los musulmanes y lo cedió a su esposa Almodís como dote.
La localidad fue creciendo a su abrigo hasta que cayó en decadencia durante el siglo XIV debido a las guerras y conflictos. En el año 1949 fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional.
Para visitarlo, imprescindible hacer reserva en el Museo Comarcal del Urgell., info@museutarrega.cat que es, además, punto de información turística.

– Plaza e Iglesia de Sant Antoni
El paseo nos lleva hasta la plaza de Sant Antoni, conjunto medieval a los pies de las ruinas del castillo.
En esta plaza porticada se sitúa la iglesia de Sant Antoni, el Santo Hospital del siglo XIII, la biblioteca comarcal y la sede de las oficinas de la Feria de Teatro.
Un multiespacio que recorre varias épocas de la ciudad y espacio emblemático durante la feria del teatro.

– Adoberia del Molí del Codina
Gracias a las excavaciones realizadas, entre los años 1997-1998 y 2004-2005, en el lugar conocido como Molí del Codina, aparecieron los restos de una curtiduría (adoberia en catalán) que estuvo en funcionamiento durante los siglos XV, XVI y primera mitad del XVII.
Esta zona y la del castillo son de las únicas que conservan lienzo de la muralla.
Imprescindible su visita guiada, es uno de los lugares más fascinantes del casco antiguo, aunque nos ha dado mucha pena por el estado de su conservación.

– Barrio Judío
Unos pasos más adelante accedemos al antiguo barrio judío medieval.
Poco queda de aquella esplendorosa época, aun así disfrutamos de una serie de calles, puertas, casonas e incluso restos de la necrópolis judía que conservan el esplendor de una época pasada.
Merece la pena realizar una visita guiada para entender la relevancia que tuvo esta comunidad en la historia de la ciudad.
En el Museo Comarcal puedes conocer la trágica historia sufrida por esta comunidad en 1348.

– Calle Mayor y otras rutas temáticas
Después, accedemos a la encantadora calle mayor para pasear tranquilamente por el corazón del casco antiguo.
Nos dejamos aconsejar y realizamos la ruta modernista y la industrial donde aprendemos de la transformación de la ciudad desde diferentes puntos de vista como el económico, el social y el arquitectónico.
Destacan en estas rutas los edificios de la estación de tren, la farinera Bacells o la sede de la Cámara de Comercio, entre otros.

– Parc de Sant Eloi
Reservar parte de tu tiempo para una visita pausada de este espacio natural.
Situado en la cima de la sierra de Sant Eloi, este rincón nos ofrece unas vistas magníficas a la ciudad.
Sobresale la ermita dedicada al santo, fundada en 1248 y declarada Bien Cultural de Interés Nacional en 1977.
En 1913 esta sierra fue reforestada por la Asociación Amigos del Árbol, iniciando el proceso de construcción del parque.
De libre acceso, Sant Eloi es un museo al aire libre donde se puede disfrutar de largos y tranquilos paseos rodeados de árboles, fuentes, pozos y esculturas.
¡Déjate envolver por la magia de este espacio, no tengas prisa! En Sant Eloi hay mucho por ver, disfrutar y experimentar.

Museos de Tàrrega
Por otro lado, Tàrrega cuenta con varios museos de visita obligada como el Museu Comarcal de l’Urgell, el de la Mecanizació agraria Cal Trepat o la Sala Marcà.
Museu Comarcal de l’Urgell
La antigua casa de la familia Perelló, es la sede del Museo Comarcal del Urgell.
Además de las exposiciones permanentes, cuenta con un importante fondo de fósiles provenientes de las canteras del Talladell y un excelente conjunto de obras pictóricas y escultóricas de artistas locales de los siglos XIX, XX y XXI.

Las instalaciones del museo también conservan una colección de material etnológico, un fondo fotográfico y un importante conjunto de vestuario de principios de siglo XX (donación de la familia del escritor Manuel de Pedrolo).
Sobresale entre todo ello, la excepcional exposición: «Tragèdia al Call. Tàrrega 1348» que cuenta el asalto al barrio judío del año 1348, una especie de «holocausto» en su época.
Merece la pena reservar hora para la visita que se complementa con un paseo guiado por el casco antiguo y el barrio judío.
Museo Fábrica J. trepat (mNACTEC)
Somos unos enamorados del Patrimonio Industrial, muchos de nuestros viajes se basan en rutas vinculadas a este elemento arquitectónico y social, injustamente olvidado en la mayoría de pueblos y ciudades, pero que allí donde se conserva, cuenta la historia cotidiana del territorio.
Tàrrega ha sabido conservar esa parte de su historia recuperando el espacio ocupado por la fábrica Trepat, popularmente conocida como «Cal Trepat».
Cal Trepat fue el principal productor de maquinaria agrícola en España durante el segundo tercio del siglo XX.

Pasear por dentro de sus naves nos ha transportado a un pasado no muy lejano, para conocer el día a día del trabajo en el interior de una fábrica. ¡Hemos alucinado!
La visita guiada es de 10. La fábrica es tremendamente fotogénica y además, forma parte del conjunto de espacios del Museo de la Ciencia y de la Técnica de Cataluña (conocido como mNACTEC).
¿Imaginabas que una ciudad del interior de la provincia de Lleida pudiera sorprender de esta manera? ¡A nosotros nos encanta!

¿Dónde alojarse en Tàrrega?
Tàrrega cuenta con una interesante oferta de alojamientos, a través de la web de Ebooking podrás encontrar el más adecuado a tu perfil y bolsillo..
Merece la pena pasar un fin de semana o varios días en esta dinámica e interesante ciudad.
Si decides venir para la feria de teatro, te aconsejamos reservar con mucha antelación.
El evento atrae a personas de todo el mundo y la ciudad cuelga el cartel de completo, así como los pueblos de alrededor.
¿Cómo llegar a Tárrega?
– Coche
Tàrrega se alza junto a la A2 a pocos kilómetros de Lleida capital y de Barcelona. Cuenta con una buena conexión con toda Cataluña.
Por su centro pasa la Nacional II (N-II) y la C-14. En sus alrededores se sitúan:
- Autovía de Nordeste (A-2) Lérida – Tárrega – Barcelona
- Autopista del Nordeste (AP-2) Zaragoza – Lérida- Tárrega – Barcelona
- Nacional II (N-II)
- Carretera C-14 (C-14)
- Variante de la C-14 (C-14)
- LV- 2021 (Calle Migdia, paseo del río)
- C-53 (Carretera Balaguer)
- L-310 (Carretera Guisona)
- Ronda dels Comtes de Barcelona Ronda urbana
-Transporte Público
Nosotros, preferimos el transporte público, más sostenible y cómodo. Tàrrega está bien comunicada por tren y autobús de línea regular.
Puedes encontrar la información en la web del ayuntamiento.

Si además, te animas a venir con tu bici, la ciudad cuenta con una red de más de siete kilómetros de carril bici para disfrutarla cómodamente.
¿Dónde Comer en Tàrrega?
La gastronomía también tiene protagonismo en Tárrega. La coca de recapte es un clásico de la zona, pero también el bacalao a la Tárrega, elaborado con manzana, cebollita o alcachofas, entre otros ingredientes.
La oferta gastronómica es otro de los puntos fuertes de Tárrega, a lo largo de la ciudad y en sus alrededores, puedes encontrar lugares para todos los gustos y bolsillos.
Destacan La Cava (imprescindibles sus bravas) quien recientemente ha cambiado su ubicación a un lugar más amplio, El celler de l’Artista, Niam Restaurant o el Tastimotant.

Déjate envolver, además, por algunas de sus apreciadas pastelerías y forns de pa.
Como ves, Tàrrega es un interesante destino de interior, ideal para desconectar durante un fin de semana o vivir una escapada junto a amigos, pareja o familia.
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