En el año 2012 Extremadura y Portugal llegaron a un acuerdo para crear el primer parque natural internacional de Europa. De la mezcla de Tajo (español) y Tejo (portugués) nace el Parque Natural del Tajo Internacional.
Parece que a Extremadura le gusta relacionarse bien, pues la región también participa en otro Sendero Internacional con el geoparque Villuercas como protagonista
Cedillo, un pueblo entre Portugal y España
Nuestra aventura, por este singular entorno natural, comienza en Cedillo, un pequeño pueblo situado en el punto más occidental de Extremadura.
Tiene la peculiaridad, entre otras cosas, de limitar al norte, al sur y al oeste con Portugal. Curioso ¿verdad?
Fue fundado por pescadores portugueses allá por el siglo XVI. En su término municipal se encuentran vestigios de asentamientos humanos y de tumbas antropomorfas del siglo IV al VIII.
Pasa a ser municipio español en el siglo XVIII. Dicen que su nombre deriva de ser un pueblo «cedido».
Cedillo y su guía telefónica
Iniciamos la ruta con una visita protocolaría al ayuntamiento. Cedillo es famoso por su peculiar guía de teléfonos, confeccionada a partir de los motes de los vecinos.
Tras la bienvenida, por parte del alcalde y, presentación del equipo de guías, dejamos nuestro equipaje en La Casa del Barquero, un precioso alojamiento rural perfecto para iniciar las rutas por el Parque.
Mirador de la Carrasquera
En el paraje conocido como Mirador de La Carrasquera nos espera una comida típica tras atravesar en 44 una senda de tres kilómetros, también accesible a pie.
La mezcla de la gastronomía portuguesa y extremeña cobra sentido en Cedillo.
Una mesa, delicadamente decorada bajo la sombra de una pérgola, es nuestro restaurante al aire libre.
Todo un lujo al alcance de la mano, servido en platos de fusión hispano lusa: sopa de pez, ibéricos y «Serradura».

Todo un lujo en el Mirador de la Carrasquera
La Carrasquera es un lugar ideal para preparar un picnic con amigos, con la familia o en pareja.
Todo esta preparado al detalle para disfrutar de uno de los rincones más bellos del parque. El mirador ofrece vistas al río Tajo y a su afluente, el río Ponsúl.
He pasado un inolvidable momento junto a un grupo de personas increíbles. Estas son las mejores experiencias de cualquier viaje, compartir animada charla con los lugareños.
Gastronomía Rayana
El pescado (una carpa) salió esa misma mañana del Tajo, el cuenco de la sopa es un trozo de corcho recogido de un alcornoque de la zona. el resto de productos, también, todo es kilómetro cero.
Nuestros anfitriones cuentan la ilusión provocada por la creación del Parque Natural del Tajo Internacional.
Un arduo trabajo colectivo de los municipios incluidos en la reserva natural, así como de las esperanzas puestas en este tipo de turismo sostenible.
Relatan, divertidos, las anécdotas que produce la mezcla del portugués y el castellano.

Sopa de pescado del río Tajo

Dulce de Serradura
Cuentan que el postre, la Serradura, es «dulce y melancólico» como un fado portugués.
Sencillamente sublime. ¡Que bien sienta una comida hecha con tanto mimo!

Nuestro cocinero, la sopa de pez y recipiente de corcho
Tras la animada charla y la deliciosa comida, me embeleso con las vistas panorámicas de La Carrasquera.

El placer de lo sencillo – Mirador en Cedillo
El Balcón de las Pizarras
Casi sin tiempo para la digestión, volvemos a los 4X4 para conocer el Balcón de las Pizarras.
Punto de observación de las aves reinas de este Parque Natural: la cigüeña negra, el águila imperial y el buitre negro.

Observando aves desde el Balcón de las Pizarras – Cedillo
Los 4X4 nos introducen en la impresionante Dehesa extremeña. El paisaje es muy generoso con el visitante.
Abundantes verde, flores, azul del cielo, marrón de los alcornoques. Una auténtica explosión de color y olor en primavera.

Paisajes de la Dehesa – Cedillo
Por el camino nos topamos con paneles de abejas, muy recomendable no molestar, y manadas de vacas retintas que parecen toros bravos.
Valle del río Sever
Llegamos al valle del río Sever donde se localiza otro de los grandes protagonistas del parque, los ciervos. ¡Pero no vemos ninguno!
El guía nos emplaza a regresar en otoño, ya que esta zona es uno de los mejores lugares del mundo para presenciar la berrea.
¡Tomo buena nota!

Vacas retintas en el Parque Natural Taejo Internacional
En medio de un bellísimo alcornocal termina el primer día de ruta.
Nos encontramos ante un paisaje de cuento donde se ubica un extraordinario conjunto de tumbas antropomorfas con piezas únicas que van del siglo IV al VII.
Las explicaciones del guía nos dejan boquiabiertos. La orientación, la posición de los cuerpos, la manera de tallarlas…, ¡hay que venir hasta aquí para verlo!
Cedillo, es pequeño, no más de quinientos habitantes, pero resulta muy interesante.
Casi perdido en los confines de nuestro país atrapa al viajero para conducirle de sorpresa en sorpresa.
Museo Etnográfico de Cedillo
Antes de cenar, visitamos su Museo Etnográfico.
Los guías aprovechan el ocaso para explicar que el Parque Natural tiene uno de los cielos con menor contaminación lumínica de la Península, convirtiendo a Cedillo en un excepcional punto de observación estelar.
El museo contiene todo tipo de utensilios, herramientas, ropas y menaje utilizado antiguamente.
Destacan los tuppers de la época, unos recipientes de corcho que conservan los alimentos de manera natural.
También hay un apartado dedicado al parque, aunque el centro de interpretación principal se encuentra en la localidad de Alcántara.

Museo Etnográfico de Cedillo y sus Tuppers
El responsable nos acompaña por las diferentes plantas. Y sabiamente, dejan para el final la guinda del pastel: la terraza-mirador.
Un excepcional mirador panorámico desde donde apreciar el bello atardecer del entorno y el cielo de Extremadura.

El cielo del Parque Natural Taejo Internacional
Una deliciosa cena rayana con buñuelos de bacalao, frango asado (pequeño pollo portugués) y patatas, despide nuestro primer día por este singular enclave natural.
El Parque Natural desde el agua
Tras conocer la parte terrestre del Parque, toca disfrutar del entorno desde el agua.
El río Tajo nos mecerá en sus aguas y mostrará todo su encanto justo en la frontera entre España y Portugal.

Paseo Fluvial por el Tajo – Cedillo
El crucero fluvial parte del embarcadero situado en Cedillo, a pocos metros de una presa de titularidad privada, frontera entre los dos países.
Solo se abre al tráfico los fines de semana.
Los habitantes de Cedillo piden la apertura todos los días, la mayoría tienen familia y vinculaciones con la vecina Montalvao.
Viajar durante la semana supone recorrer unos ciento veinte kilómetros par allegar hasta Montalvao, mientras, los fines de semana solo recorren unos veinte kilómetros.

La presa de la discordia en Cedillo
La embarcación, Balcón del Tajo, espera para mecernos durante dos horas en un relajado paseo entre Cedillo y Herrera.
El viaje es muy didáctico, el barco es una escuela de naturaleza.
La parte de abajo está preparada como aula de interpretación donde se explica la singularidad del río, los datos referentes a la flora y fauna del parque.

Paseo fluvial en el Balcón del Tajo
La belleza del Tajo, el río más largo de la Península
Tras la explicación, toca salir al exterior y moverse libremente para disfrutar del río más largo de la Península.
Se avistan nidos de cigüeña negra. Llegamos a la confluencia del Tajo y su afluente.
Resulta curioso ver como cada una de las orillas tiene una flora y vegetación diferente, la española al norte es más frondosa y verde, la portuguesa al sur, es más seca.
Tras una relajada y preciosa travesía, dejamos el Tajo, muy a mi pesar.
Dehesa La Solana
El final de mi ruta por este paraje natural termina en la Dehesa La Solana, un criadero y secadero de jamón.

Dehesa de Extremadura, medio natural del cerdo
¿Que más se puede pedir para enamorarse de Extremadura? Esta tierra lo tiene todo para cautivar al visitante más exigente, y en lugares como el Parque Natural del Tajo Internacional se hace realidad.
Un buen repaso por las excelencias del primer Parque Natural internacional de Europa. Gracias por mostrar los encantos de este rincón compartido por España y Portugal.
Un saludo desde el Tajo Internacional!!
Hola Dany! gracias por pasarte por nuestro blog y por tu comentario. Un placer poder disfrutar de este maravilloso Parque compartido, todo un ejemplo de que la buena vencidad lleva a proyectos interesantes.
Un abrazo,
Eva y Caremlo
Pareciera que no faltan actividades para realizar en el parque, ahora me dieron ganas de visitarlo, en especial el Crucero Fluvial.
Gracias por compartilo con nosotros!
Hola Alejandro, gracias a ti por pasarte por el blog. Como bien dices, este Parque cuenta con un gran número de actividades a realizar y todas muy interesantes. a ver si te animas a venir por aquí!
Un abrazo
Qué bonitas fotos y qué verdor. Desconocíamos este parque y eso que los padres de Ely son de allí. Como cambia la dehesa de una época a otra por cierto. La foto de los jamones en el secadero no tiene precio quien los pillara. jeje Un saludo
Un abrazo pareja!, pues tenéis que ponerle remedio a ese desconocimiento y más teniendo familia allí. si os gusta el treking o el senderismo, el Parque es una buena opción!. La Dehesa extremeña es una preciosidad y un tesoro medioambiental de nuestro país.
jajaja, ays, ese jamoncito que despierta pasiones :-).
Un abrazo
Que excursión más bonita para hacer!! Me está dando una envidia…. las fotos son una pasada.
Me apunto el sitio que no lo conocía.
Gracias Netikerty! Merece la pena hacer esta excursión y recorrer las diferentes localizaciones del Parque Natural, es increíble, una verdadera joya natural y muy desconocida.