Alguien debería advertir del impacto que supone atravesar la puerta de Bab Bou Jeloud en la antigua medina de Fez-El Bali.
Su delicada decoración, de mosaicos azules, da la bienvenida a un escenario sacado de las mil y una noches ¡O eso parece!
Atravesarla es realizar un salto en el tiempo. Es encontrarse de golpe en una ciudad sin coches, sin edificios altos, sin olor a humo, sin asfalto que se pega a los zapatos.
Traspasar el umbral de Bab Bou Jeloud es hacer una inmersión a la edad media y, a la vez, un viaje a través de los sentidos.
Del otro lado, la decoración cambia de color, los azulejos son verdes.
El color por excelencia del islam (representa la alegría, la vida, la naturaleza, la felicidad, la esperanza y la paz).
Se encuentra en las decoraciones de los interiores de las casas, de los edificios importantes y de las mezquitas.

Recomendaciones para visitar Fez – El Bali
No hay nada como llevar una guía profesional para aprender un poco más sobre la cultura, las tradiciones y la religión de un país.
No es lo mismo caminar sin sentido por la encrucijada de más de 9000 calles de la medina, que caminar de la mano de una persona conocedora de cada callejón, cada plaza, cada monumento y cada historia latente del lugar.
Nuestra guía se llama Sabah. Antes de comenzar nuestro paseo nos ha dado unas interesantes pinceladas de historia, además de consejos a tener en cuenta para disfrutar con tranquilidad de la medina.
Sobre todo para personas, que como nosotros, no están acostumbrados a transitar por ella.
Tres palabras son la clave para un buen entendimiento: balak (¡cuidado!), yala (¡vamos! o ¡venga!) y la que abre más puertas, sukran (¡gracias!)
A lo largo del paseo, pude comprobar que es cierto, fueron las palabras más escuchadas.

Historia de Fez (resumen)
La ciudad fue fundada en el año 807. Idrís II traslada la capital desde Volubilis, previamente fundada por su padre Idrís I.
Los Idrisidas fueron la primera dinastía musulmana de Marruecos.
Fez, es símbolo nacional religioso. En el interior de El-Bali se encuentra el Mausoleo de Mulay Idrís, santuario dedicado al fundador de la ciudad.
Las calles colindantes al mausoleo se conocen como Distrito Sagrado y, hasta no hace mucho, estaban prohibidas a las no musulmanes.
Además, en la vieja medina se sitúa la universidad y la biblioteca más antiguas del mundo.
Su trazado urbanístico conserva el origen medieval y tradiciones que se pierden en los anales de la historia.
Todo esto llevó a su declaración como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Un paseo por El Bali (casco viejo de Fez)
La Medina de Fes-El Bali comprende la zona más antigua de la ciudad (Siglo VIII).
Su urbanismo es caótico, de calles imposibles con recovecos que consiguen desorientar hasta al más experto.
Todo esto desde mi perspectiva, ¡sus habitantes son capaces de llevarte a una de las salidas principales en un abrir y cerrar de ojos!
Siempre está atestada de personas, animales de carga, tiendas, mercancías, sonidos y olores.
Sobre todo en sus calles principales Talaa Kbira (la gran cuesta) o Talaa Sghira (la pequeña cuesta).
Llama mi atención la amalgama de carteles publicitarios superpuestos en las anaranjadas fachadas.

Festival de Músicas Sagradas de Fez
Hemos llegado en un momento importante, Fez celebra el Festival de Músicas Sagradas.
La ciudad es un hervidero de personas llegadas de todo el mundo para presenciar el evento. En sus plazas encontramos espacios adaptados para los conciertos.
Sabah, nuestra guía nos dirige magistralmente por la calle principal, deja que nos impactemos del ambiente, que empecemos a acostumbrarnos al trasiego de personas y animales.
Yo miro y observo todo lo que puedo mientras paseo siguiendo al grupo. Huelo cada fragancia e inicio un juego improvisado, intento acertar cada uno de los intensos aromas.
En la Medina de Fes-El Bali se sitúan las principales atracciones de la ciudad.
Las madrazas (escuelas coránicas), los grandes zocos de las calles principales, las plazas de Nejjarine y Seffarine, el Distrito Sagrado, la universidad y biblioteca más antiguas del mundo.
A lo largo de la mañana son los puntos que recorremos.
Medersa Bou Inania
Interesante espacio arquitectónico, de los pocos lugares con entrada permitida a no musulmanes, aunque hay espacios restringidos, sobre todo los de la oración.
Se accede a través de la arteria principal, la Talaa Kebira. Durante la oración permanece cerrada.
Un espacio tranquilo, acogedor. Es una de las madrazas mejor conservadas de la ciudad. En el exterior sobresale su torre de brillantes azulejos verdes.
En el interior destacan las paredes ricamente ornamentadas a mano en estuco y madera. Fue inaugurada en 1350. Su uso es escuela coránica de estudios superiores.
Los zocos de Fez-El Bali
A lo largo de la medina se ubican los zocos, especializados y ordenados según actividades.
Carpinteros, caldereros, las especies y el especializado en el mundo de las novias, entre otros.

Barrios de El Bali
Fes-El Bali contiene más de 300 barrios con cinco elementos básicos: mezquita, escuela, fuente, hammam y un horno.
Pasear por el interior de un barrio ha sido una de las mejores experiencias de la visita, aquí he podido respirar y sentir lo cotidiano.
Lo turístico queda alejado.
Los niños juegan a la pelota, las mujeres compran fruta y encuentras puestos con productos locales.

Las escenas de la vida diaria han salido a nuestro encuentro. Por un momento abandonamos el caos de gente, turistas y animales de carga.
De repente nos acompaña una inusual soledad.
Fondas
Las fondas constituyen otra de los puntos interesantes en la visita.
Algunas sobreviven en un estado lamentable de conservación y otras se mantienen gracias a la protección de la UNESCO.
Sobresale la Fonda de Nejjarine, actualmente alberga el Museo de la Madera.
Me ha resultado imposible remarcar el parecido con algunos lugares de nuestro país donde existen edificios y construcciones muy parecidas, quizás la vieja medina de Granada fue en su momento así.
Lugares de «parada y fonda», utilizados por los comerciantes de la ruta del oro, así como de diferentes productos traídos del sur.
Aquí, los comerciantes y su séquito se «refugiaban» dentro de la medina.
Tenían espacio para los animales, para dormir e intercambiar todo tipo de mercancías.

Plaza Seffarine
Es uno de los rincones más fascinantes de Fes El Bali.
En ella se ubica uno de los «gremios» más antiguos de la ciudad, los caldereros.
Unas calles antes de llegar se oyen los repetitivos ruidos del latón golpeado por los martillos.
La escena es preciosa, o a mi me lo parece, una gran cantidad de artesanos realizando plácidamente su trabajo mezclados con turistas y animales de carga, en perfecta armonía.
La plaza contiene la Biblioteca Karaouine y la Madraza Seffarine, dos importantes monumentos del rico pasado de la ciudad.
Todo un orgullo para sus habitantes.

Las Tenerías o curtidorías
Siempre hay un lugar sobresaliendo por encima de los rincones de una ciudad, tanto para bien como para mal.
Eso es lo que ocurre con las Tenerías de Fez. ¡No dejan indiferente a nadie!
Un mundo de olores nauseabundos mezclado con los colores chillones en las pozas del tintado. Las curtidurías representa la actividad más antigua de Fez.

La mayoría utilizan las técnicas ancestrales de elaboración del cuero, uno de los productos estrella de Marruecos, posteriormente vendido como marroquinería.
La visión desde lo alto es casi apocalíptica. No puede dejar de pensar en los hombres y animales trabajando en pésimas condiciones de higiene y salud.
Muchos de los productos utilizados para el cuero son abrasivos, así como contaminantes y malolientes.
Aún así, es una de las estampas más famosas de la ciudad y la visita es obligada.
Otros objetos llaman mi atención desde las alturas de la tenería, un abrumador conjunto de parabólicas invade el panorama desde el mirador.
En Marruecos, las estampas de los tejados repletos de blancos receptores se ha convertido en parte de su paisaje.

Tras la visita a las tenerías, callejeamos de nuevo, impregnándonos del ambiente cotidiano de la medina.
No dejan de pasar burros cargados con los productos más variopintos.
Entramos y salimos de calles de interesante arquitectura, pasamos por la puerta de Madrazas y Mezquitas.
Pero el tiempo rige nuestra visita y nos espera una suculenta comida en un recoleto Riad.

Riads, descanso y comida
Después de horas y horas caminando por El Bali, ha llegado el momento de probar la interesante y variada gastronomía marroquí.
Para una persona vegetariana, como es mi caso, Marruecos es un paraíso. Su base alimentaria son las verduras, frutas y especies.
No obstante, tienen un variado mundo de platos realizados con carnes y aves.
¡Qué lugares tan maravillosos son los Riads! Una vez entras, desconectas del mundo. Son pequeños paraísos en la tierra.
Todo el grupo hemos seguido tomando buena nota de los apuntes de nuestra guía, Sabah.
Explica que estos lugares recogieron la tradición romana del patio interior y la manera de sentarse a comer.

Borj Sur
Tras la comida y el imprescindible té a la menta, terminamos el paseo por Fez mirándola desde las alturas, en la zona conocida como Borj Sur.
Desde este lugar contemplas la amalgama de calles anteriormente recorridas.
Ahora se muestran las imágenes de las mezquitas, de la universidad, del mausoleo.
El color verde sobresale y los azulejos de los edificios emblemáticos brillan con los toques del sol. Sin dudarlo, ¡Fez enamora!

Notas personales sobre Fez – El Bali
Ha sido un día muy intenso y cargado de sensaciones, especialmente para una persona con claustrofobia.
El paseo por El Bali ha supuesto todo un reto personal. Ya lo decía el gran Paul Bowles cuando retrataba la ciudad:
«Cabe la posibilidad de que cualquiera que padezca claustrofobia encuentre que es una confusa pesadilla de túneles, de callejones sin salida y de paredes sin ventanas».
Pero, ¡he superado la prueba! Mi eterna curiosidad ha podido con las ganas de salir corriendo buscando espacios abiertos.
Igualmente el apoyo de mis compañeros ha servido de mucha ayuda.
Dedico este post a mis compañeras de Seis Maletas, con las que he tenido el honor de compartir bitácora y jornadas maratonianas de Máster. Gracias por creer en mi.
Así como a David Rull y Santiago Tejedor por su apoyo durante los momentos en los que la claustrofobia parecía poder conmigo.
Gracias a Elena, de Xaluca Tours, por su atención y apoyo a lo largo de las calles más estrechas y oscuras, consiguiendo con su conversación que olvidara mis ganas de salir corriendo.
también a Sabah por su increíble profesionalidad y sabiduría. Con sus historias consiguió mantenerme distraída.
Ycomo no, al resto de compañeros de la Expidición del Máster de Viajes por su silencioso apoyo y comprensión.
Cada uno de vosotros me dio fuerzas para superar el miedo y la ansiedad de la claustrofobia.
¡Gracias Fez por el reto que has supuesto para mi. Espero volver pronto!
Muy buen recorrido y relato, Eva! me ha traído muchísimos recuerdos, me sentí fascinada desde el momento 1 de mi «paseo» por El Bali, hace ya unos cuantos años, y me quedé con ganas de muchísimo más… Sí, está muy bien ir con guía, yo también lo hice así, pero me encantaría probar a ir por mi cuenta y estar el tiempo que quiera en cada esquina, recoveco, y si me pierdo, me pierdo, porque seguro que alguien te ayuda a encontrar la salida, aunque es cierto que yo no padezco claustrofobia y eso ayuda mucho… En fin, llegará el momento un día, y cumplir ese sueño de estar allí hasta hartarme, si es posible 🙂
Un beso
Alicia
Que sorpresa Ali!, muchas gracias por tu comentario. Bueno, realmente coincido contigo, un paseo por El Bali por cuenta propia debe ser toda una experiencia y seguro que cuando regresemos a Marruecos, lo hagamos así. Lo bueno de la visita guiada son todas esas explicaciones y detalles que la guía nos iba comentando. Un saludo!
Uy… que ganas de volver a Marruecos al leer tu post 😀 es que no visitamos Fez… no se cuando volveremos pero seguro iremos a esta ciudad…
Hola Olga, pues ya sabes, en la agenda para tu próxima visita porque Fez lo merece 😉
¡Me encantó la descripción!, es como ir adentrándose poco a poco en la mezquita, desde esa puerta, tan enigmática al principio, hasta las parabólicas increibles. Cuantas cosas interesantes, no sabía que las medinas podían llegar a tener tantas calles, ni tampoco conocía la vista hermosa de la última foto. Y por lo poquito que conozco de España, te digo que las construcciónes me recuerdan algo de Andalucía, o de lo que en América se llamó el «estilo colonial» de casas copiadas de España (con patios y arcos). Todo da vueltas y el mundo es increíble. Lástima el tema de las curtiembres, es un tema sobre el que habría que intervenir, para que la gente no se quede sin trabajo, pero también para que no se continúe trabajando en esas condiciones. Saludos!!
Hola Fernanda, muchas gracias por tu preciso y precioso comentario. Tienes razón, en España, sobre todo en la parte centro-sur se puede encontrar muchas poblaciones de importantes características musulmanas, es parte de nuestra cultura y legado. A mi también me pasa que cuando viajo a Marruecos no puedo dejar de encontrar muchas similitudes, y como bien dices, este legado, lo llevamos a América durante la colonización por eso te suena tanto.
La parte del trabajo en las curtidurías, pues me imagino que con el tiempo, estos países alcanzaran los niveles de protección laboral de los nuestros, o eso espero.
Un abrazo y no dudes en visitar Fez, ya ves todo lo que se puede llegar a aprender en su Medina 😉
Que maravilla Marruecos, y que bien lo describes.
Se respira historia y tradición.
¡Esa curiosidad no la pierdas nunca! ¡Yala, Yala!
Saludos.
Muchas gracias por tu comentario Iciar ;-). Pues sí, tienes mucha razón con la historia, además Marruecos lo tenemos tan cerca y a veces parece tan lejano.
jajaj, no, nunca la perderé, mi curiosidad hace que cada día me mueva!!!
Precioso post de uno de los más bonitos lugares de Marruecos. Tengo ganas de volver porque la visité un viernes y el ambiente en la medina no era el mismo.
Un saludo!
Gracias por tu comentario Jordi ;-). Yo también quiero volver, además ahora que «conozco» la Medina un poco mejor podré pasear más tranquila.
Saludos!
Hola Eva ! Muchas gracias por este blog tan especial ! Podrías pasarme el contacto del guía en fez porfa ? Viajamos la semana que viene allí !
Graciiiaaasss
Hola gloria! Muchas gracias por tu comentario 🙂 Nos alegra que te haya gustado. Ohhh, Fez, bella ciudad.
La guía la contrató la agencia con la que hicimos el viaje, intento preguntarles a ellos y te digo algo enseguida.
Un abrazo,
Eva