Una de las actividades imprescindibles en el Parque Natural del Lago de Sanabria y alrededores es visitar al Centro del Lobo Ibérico en Robledo de Sanabria.
Una instalación natural para la recuperación de lobos salvajes heridos, enfermos y/o decomisados por la administración.

¿Qué es el Centro del Lobo Ibérico?
Es un recurso educativo y de dinamización socioeconómica de la Sierra de la Culebra, donde habitan lobos en semilibertad.
Este lugar es un templo en honor de uno de los personajes más queridos/odiados de Sanabria, el lobo, símbolo indiscutible de la comarca.
Pero el centro, también se ha convertido en uno de los recursos turísticos más importantes de la comarca, batiendo récords de visitas desde su inauguración.

Desde un punto de vista didáctico, una serie de documentales y exposiciones explican la relación hombre-lobo a través de las historias contadas por los vecinos de la comarca.
Además, el centro ofrece la posibilidad de observar lobos en semilibertad mientras aprendes con las impecables explicaciones de Jesús Palacios, responsable del centro, toda una eminencia del mundo natural español.
Jesús, director del Centro del Lobo y del Parque Natural, fue compañero de Félix Rodríguez de la Fuente a quien han rendido homenaje al dar su nombre al lugar.

Nuestra visita al Centro del Lobo Ibérico
Desde el Centro de acogida al visitante del Parque Natural del Lago de Sanabria y alrededores nos recomiendan esta visita.
Hacemos caso a la responsable que nos atiene y reservamos hora para la visita guiada.
Puedes hacer el recorrido por libre, sin necesidad de reserva previa, pero en esta ocasión recomendamos ver el lugar de la mano de uno de sus monitores.
Tras dejar el coche en el amplio aparcamiento gratuito, caminamos por un sendero natural que forma parte de las rutas tradicionales de Robledo.
La visita se inicia en el amplio hall donde nos reciben los aullidos de uno de nuestros animales favoritos. Somos muy fans del lobo. Estamos emocionados y expectantes.
Conscientes de que el centro no es bienvenido en algunos ámbitos, respetamos todas las opiniones, pero queremos vivir en nuestra piel esta experiencia.
El trato de los monitores y guías es excepcional. Indican las normas para no molestar a los animales que veremos después, explican el por qué de este centro, su objetivo.
Poco a poco nos introducen por las diferentes salas expositivas a través de la historia de convivencia del hombre y el lobo (es imposible no recordar los episodios de la serie «el hombre y La tierra» de Félix Rodríguez de la Fuente).
Audiovisuales, música popular y tradicional, historias, cuentos, mucha pedagogía condensada en un espacio creado para cerrar las heridas profundas de una convivencia que no siempre ha sido pacífica.
El plato fuerte nos espera en el exterior. el paisaje de la Sierra de la Culebra se abre ante nuestros ojos a través de los senderos por los que nos guía el monitor.
Caminamos por el hábitat del lobo ibérico al que conoceremos, si se deja ver, desde unos magníficos observatorios magníficamente integrados en el paisaje.

De repente, el silencio invade el espacio, el grupo se divide entre los diferentes observatorios. Solo se escuchan las palabras de algún pequeño que no puede contener la emoción.
De repente, sin saber cómo, Jesús aparece como un gurú entre los árboles acompañado de un precioso ejemplar. ¡Brutal!
A partir de aquí, Jesús y los lobos van apareciendo atraídos por el olor de la comida. Estoy tan emocionada por verlos tan cerca que me olvido de las fotos, del vídeo, de todo a mi alrededor. Seré una ñoña, pero me he emocionado.
Jesús cuenta la historia de los inquilinos del centro de recuperación, una especie de santuario para animales heridos, rescatados o dañados por el hombre.
Encomiable labor que a veces se confunde con un circo mediático. Aunque es cierto que estos animales están socializados y adaptados al hombre.

Robledo, Oscura, Brasas, cada uno de los habitantes consiguen arrancan una emoción contenida de todos los que estamos ocultos tras el edificio de observación.
Después, acabada la presentación de Jesús, todo vuelve a la calma y damos un paseo por otro de los senderos que lleva hacia parte alta del recinto.
Los lobos han regresado a sus escondites, se camuflan en medio del bosque de tres hectáreas en el que habitan.
Nosotros, con la emoción a flor de piel, seguimos camino hacia Ungilde, interesante localidad sanabresa famosa por sus setas y arquitectura tradicional, pero esa será otra historia.
Vídeo visitamos el Centro del Lobo Ibérico
Versión del vídeo en 3D.
Datos de interés para tu visita
Cómo llegar
A través de la carretera ZA-921 que sale de Puebla de Sanabria dirección Bragança.
A la altura de Ungilde encontrarás el desvío hacia Robledo de Sanabria. el Centro está muy bien señalizado.
Dónde alojarse
Sanabria cuenta con una buena red de hoteles, casa rurales y campings, estos últimos siempre son nuestros favoritos debido a su ubicación junto al lago.
Horarios y precio
En la web del Centro del Lobo ibérico encontraréis toda esta información actualizada.
El aparcamiento es gratuito.
Recomendaciones
Haz caso de todas las indicaciones de los monitores. No molestes a los lobos. Respeta los senderos marcados.
Si es verano, lleva ropa y calzado cómodo.
El lugar está adaptado para personas con problemas de movilidad.
El edificio principal tiene lavabos, salas de espera y bar.
Después de está visita, seguro que cambia tu manera de mirar al denostado lobo, esperamos, tal como decía Félix Rodríguez de la Fuente que:
«el lobo viva donde pueda y donde deba, para que en las noches españolas no dejen nunca de escucharse los hermosos aullidos del lobo».
Félix Rodríguez de la Fuente
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